Los juegos, hay de todo tipo y con todas las formas, desde la más simple ya sea el piedra papel o tijera, a muy complejos como el ajedrez, considerado también deporte, y que cuenta con reglas y con muchas estrategias.
Lo que está claro es que crecemos jugando, desde pequeños y conforme maduramos, es una forma de divertirnos y pasar un buen rato ya sea solos, con amigos o en línea, como los videojuegos.
Cuando hablamos de gamificación estamos refiriendo a el método por el cual aprendemos mediante los juegos. Bien podemos adaptarnos al juego, por ejemplo explicar la gestión de recursos mediante Minecraft o el valor de una calle en el Monopoly o crear un juego adaptado a las enseñanzas como hacemos nosotros en Cresory donde queremos enseñar finanzas jugando.
Qué elementos son los que podemos reconocer en la gamificación para entender los principios en los que se basan los juegos. Podemos diferenciar tres elementos: las dinámicas, las mecánicas y los componentes.
Las dinámicas, aquellas que determinan cómo se va a jugar el juego y que se va a encontrar en él, aquí entran las recompensas.
Las mecánicas, como va ha funcionar el juego, como vas a subir de nivel, las reglas a seguir.
Los componentes son todas aquellas herramientas y recursos que se utilizan para jugar, para un juego online sería la web, pero para el parchís sería el tablero, las fichas y los dados.
Que tienen los juegos para entretenernos tanto, tal vez te gustan los dibujos, el arte, o el cambio de ambiente o como en los libros, descubres mediante ellos historias diferentes. Pero cuáles son las claves por las que nos atraen tanto estas experiencias.
Algunos de los elementos clave de la gamificación son los desafíos, obstáculos, recompensas e incentivos y las reglas del juego. Podemos encontrar más pero estos cuatro resumen el porque mucha gente se engancha o decide usar los juegos en su tiempo libre.
Los desafíos en los juegos pueden ir dirigidos a lograr llegar al final, si es una historia o a ganar si son partidas cortas como La Oca (y tiro por que me toca). Puede ser una dificultad mecánica, si hablamos de un videojuego difícil o del mismo Jenga (el de la torre de palitos).
Sea como sea ofrecen una desafío que el jugador intentará superar, para que el juego enganche el desafío tiene que tener la dificultad adecuada, si es muy fácil puede aburrir y si es muy difícil podemos darlo por imposible. Siempre hay excepciones y ahí entran otros elementos, un juego muy difícil pero que engancha igual es el Geometry Dash (juego de móvil de un cuadradito que va muy rápido).
Los obstáculos y las recompensas e incentivos, mientras que unos complican tu avance, los otros te recompensan por lograr un objetivo en el juego.
Las recompensas o incentivos pueden ser en forma de monedas, mejoras o propio avance.
Los obstáculos pueden ser igual de variados, desde perder objetos o dinero al morir, a no permitirte avanzar hasta que no logres algo específico. Pueden ser penalizaciones como empezar la siguiente ronda con menos ventajas o una cantidad de vidas que si pierdes te hacen empezar desde cero.
Las reglas del juego, las que marcan cómo nos relacionamos con el juego, tienen que ser claras y fijas, para no confundir al jugador.
Además deben ser lógicas, si no con el mundo real al menos con ellas mismas, para que la experiencia sea gratificante.
En ocasiones para un juego podemos usar diferentes reglas, en las cartas del Uno, cada vez que juego hay que establecer las reglas por adelantado, ya que cada uno tiene las suyas.
Aprender jugando es una forma de motivar a los más pequeños atrayéndolos a través de los juegos, que con herramientas como las recompensas enganchan a los niños a lograr sus objetivos.
Por lo tanto enseñarles mediante este método es una forma de que apliquen y asimilen conocimientos mientras se lo pasan bien.
Con la gamificación además aprenderán a lidiar con la frustración ya que no todo saldrá a la primera. Entender que cuando se equivocan o no encuentran su siguiente misión, se estancan o se pierden, hay que volver al principio o repasar, para poder dar con la solución.
Además con las nuevas tecnologías, hay formas más accesibles para educar mediante juegos, muchas plataformas buscan aplicar los conceptos y elementos de los juegos para preparar a los niños. Un ejemplo son los múltiples juegos que te van explicando los conceptos del coding, una forma entretenida de aprender programación.
Nosotros mismos en Cresory queremos que mediante el método de la gamificación los niños entiendan, aprendan y apliquen los conceptos de finanzas, como el ahorro, de una forma entretenida y divertida.